domingo, 19 de abril de 2020

INSTINTO . CAPÍTULO TERCERO (Segunda Parte ) (Registrado en SAFE CREATIVE ENERO 2020)





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Iam no supo cómo reaccionar . Claire sólo podía mirar hacia el pie de su copa , la que sostenía con una de sus manos . Su rostro entristecido  y la muestra evidente de una garganta más cerrada de lo normal hicieron concebir en él la idea de que retenía  sus ganas de llorar. Fuera porque  no estuviera sola ,  porque  con quién tenía delante no acarreaba demasiada confianza aún o tan sólo por no dar una imagen equivocada de lo que acostumbraba a reflejar , como alguien sin debilidades aparentes o públicas  endurecida por los entrenamientos y su formación estricta ,  fue la siguiente pieza musical en escucharse la que le dio pie para tratar de sacarla de ese pozo en el que él la había hecho meterse .  
Con el sonido de los primeros acordes (If This World Were Mine -Marvin Gaye )  él le extendió la mano encima de la mesa acercándosela a la suya . Claire desvió sus ojos hacia aquellos dedos que la invitaban a evadirse, a rememorar quizás el único instante en el que verdaderamente se dejó ir siendo simplemente ella misma .
Aceptando su invitación ,  tras cogerle su mano férreamente , Iam la sonrió  y a ella no le quedó más remedio que volverse a dejar llevar por aquel hombre cuyas auténticas intenciones desconocía .  


La luz tenue de la habitación hacía destacar la Mezquita  completamente iluminada y amparada por un cielo tan hermosamente azul  que hacía del paisaje urbano algo irreal .
Con firmeza , la mano izquierda de Iam pareciese quedar apoderarse de ella al aferrarse a su espalda con determinación acercándola a su pecho .  Un calor humano tan agradable por parte de un desconocido ... la sensación de sentirse protegida por una vez . Una extraña sensación de seguridad que no lograba comprender y una atracción más que evidente que se empeñaba en ocultar  aunque su sonrisa o su forma de mirarla  fueras suficientes para que esa timidez casi forzada  y a punto de estallar se acrecentara, algo que no  recordaba haber sentido  con ningún hombre .

Sin que el tiempo midiese esta vez la oportunidad , la comodidad y la relajación en la que ella se vio sumida provocó , para sorpresa de él , que la mano que había depositado en su hombro desde el principio fuese deslizándose hacia el cuello de su guía en la danza  abarcando su nuca , acariciándola .
Y en su espalda , la mano masculina comenzó a descender hasta su cintura como si fuese su propia piel la que se intercalara entre los dedos ,  haciéndose con su cuerpo de la única manera  que podía permitirse aunque no coincidiera con lo que anhelaba .  Lo único que necesitaba él era un gesto de correspondencia , sólo uno  , pequeño y casi insignificante , el mismo que continuase buscando el día de la boda , el mismo que nunca olvidó desde que se  vieron , que le mirase por voluntad propia .  Como si le hubiese leído el pensamiento Claire alzó la barbilla coincidiendo con el término de la canción , viendo sus deseos   culminados  por una felicidad que se negó a ocultar y una amplia sonrisa devuelta por la de ella   Claire cogió  su copa de vino y se dio  la vuelta en dirección  hacia la terraza.

La Gran Mezquita Azul completamente iluminada sobre un fondo azul muy oscuro completamente despejado,  convirtiéndola en la estrella de una noche que se antojaba muy distinta de la que tenía prevista y mil preguntas conjuntadas en un único temor. Luces de ciudad que se vanaglorian de una paz de la que ahora disfrutan y  a la que no siempre pudieron aspirar . 
Pasos que se acercan y que determinan la terraza  como último destino , a su derecha para ser más precisos .  Silencio compartido y una ligera brisa que sólo es capaz de mover el cabello de ella a su libre albedrío , otorgándole la poca serenidad de la que podía  gozar .

·        CLAIRE : Sé que tienes  preguntas que buscan una respuesta .- Se dirigió a él en tono tranquilo  pero sin querer enfrentarse a lo que más duro se le hacía , lo que sus ojos expresaban cada vez que la miraba -.

·        IAM : ¿Me darás la respuesta que busco  o seguirás cerrándote en banda volviendo a levantar ese maldito muro ?

Su  sinceridad la  atemorizaba  pero no porque resultase agresivo o distante , lejos de todo ello era consciente de que Iam sólo pretendía acercarse,   pero como si de un movimiento innato se tratara  a Claire sólo le parecía posible alejarlo una y otra vez . 

Al no recibir respuesta él bebió lo que le quedaba de vino en su copa y la miró desconcertado  no entendiendo su actitud por más que lo pretendiese . Resignado se dispuso a volver al interior de la habitación  cuando la escuchó.

·        CLAIRE : No me es fácil confiar en la gente por regla general y eso me ha ayudado a sobrevivir y a ser quién soy . Siempre recta en el cumplimiento de las normas , los reglamentos , las órdenes … Pero cuando me quito el uniforme y aparece la mujer  esa seguridad y esos ánimos de supervivencia se convierten en un escudo que sigue sin distinguir al enemigo del fuego amigo  y el muro sólo tiende a crecer. – De espaldas a ella , apenas ladeó la cabeza para  continuar escuchándola . Una voz que se mostraba insegura  y nerviosa,  que se le iba calando como el agua de lluvia cuando traspasa la ropa y llega a la piel -  No es que no me fíe de ti. Contigo … Tú  haces que me sienta yo misma y es la más extraña sensación que he experimentado nunca  pero tengo miedo de entregarme , de dejar de ser yo , aquella que conozco bien y con la que he convivido , la oficial que ha escalado consiguiendo objetivos  y metas por valía propia , la que se ha hecho un nombre y a la que todos respetan . Tengo miedo de dejar de ser ella para convertirme en algo en lo  que no sé si sabré reconocerme .

Volviendo sobre sus pasos se acercó hasta donde ella se encontraba , justo a su espalda  y la familiar sensación de calor  y seguridad volvió .

·        IAM : Puedo comprender que tengas miedo – se sonrió - ¿quién no lo tendría ante una circunstancia maravillosa pero que te saca de tu zona de confort , en la que te mueves con toda la facilidad del mundo para llevarte hasta algo que no eres capaz de controlar , una montaña rusa de sentimientos y donde , como si se tratase de una misión de combate , el instinto lo es todo ?  Sé que tienes miedo y por eso te defiendes una y otra vez , alejándote , pero la cuestión es de qué  Claire ¿ de sentirte mujer  como nunca dices haberte sentido o de comenzar a pensar que siendo así todo aquello por lo que has luchado te anula en realidad y no es lo que realmente deseabas?

Con su cabeza confusa , respiró muy hondo cerrando sus ojos y dejando que la brisa le llegase a la cara . Se sentía viva , mucho , pero tan franco y directo como fue él  necesitó serlo ella .

·        CLAIRE : Blackwood – al escuchar ese nombre a Iam le cambió la cara por completo – fue un gran error en mi vida  que aún sigo pagando , no quisiera cometer otro .

·        IAM : Yo no soy él  Claire y … No sé qué es lo que te ha hecho pero sea lo que sea …  - Ella le interrumpió  antes de que pudiera terminar _.

·        CLAIRE : ¿Cuáles son tus intenciones  conmigo ? ¿Qué es lo que quieres de mí Iam ?

·        IAM : ¿A caso no es evidente ?

·        CLAIRE : - Negando una y otra vez con la cabeza -  No , no lo es . – se dio la vuelta apoyándose en la barandilla, mostrándole una inseguridad aplastante que no esperaba ver reflejada en cada gesto , en su forma de mirarle   -  Dime que  esto va más allá de un polvo ocasional y un juego de seducción , dime que  realmente esto que has querido desde el día que me viste en la boda y que has continuado ,  tu insistencia , es por algo más que por un rato de placer  , asegúrame que realmente merece la pena que derribe ese muro con el que me siento segura por alguien que no me fallará jamás  , alguien por el que de verdad merezca la pena saltarse los reglamentos , las ordenanzas , cambiar el curso de prioridades  … Alguien que no me dejará sola cuando tenga que enfrentarme a Blackwood. Dime – él se le fue acercando  con mucho cuidado  - Capitán Iam Keneth ¿Son esas  tus intenciones ?

En su pecho sentía el de ella ascender y descender cual armoniosa melodía silenciosa . Una respiración tranquila y una serenidad que vinieran de pronto , sin esperarlo , coincidiendo con su cercanía . Sus  ojos  parecían aislarse y querer perderse entre sus finos labios y en el interior de lo que sus ojos manifestaban con maravillosa claridad . Iam sabía que ella necesitaba una confirmación , necesitaba de su seguridad y determinación como si de un punto de apoyo se tratase . Necesitaba sentirle fuerte porque en el fondo ella no lo era tanto si la militar desaparecía  porque entonces la fragilidad de la que tanto miedo tenía reaparecía y , sobre todo , necesitaba estar segura de que si debía dejar todo cuanto conocía aquello  por lo que lo sacrificaba debía valer mucho la pena .

·        IAM : Si te dijera mis verdaderas intenciones me tomarías por loco pero es que no ha habido otras  desde el día que te vi en la Iglesia . No me pidas – bajó la cabeza sólo por un instante antes de que una leve y sencilla sonrisa de complicidad  iluminase su cara – que te expliqué por qué o cómo , pero no eres la única que se siente vulnerable cuando tiene al otro delante .

A Claire aquellas palabras le bastaron , no necesitó más para acercar sus labios a los de él y apenas rozarlos esperando una respuesta que no tardaría en llegar en cuanto ella , después de besarle , se separó unos pocos centímetros .  Iam volvió a mirarla y en su deseo por sentirla de nuevo y de que su cuerpo continuase estremeciéndose al abrigo de su piel, cogiendo su rostro con sumo cuidado,   devolvió el beso haciendo de su boca una única muestra de lo que había deseado desde que la viera por primera vez , la expresión de lo que sentía  y quería hacerle sentir  para no olvidar .

Escurridiza , le detuvo cogiéndole una de las manos y llevándolo al interior de la habitación . Junto a la cama ,  la misma mano que había portado la de él circundó su pecho  por encima del  fino suéter que llevaba puesto , denotando cada contorno en su piel , disfrutando de la recepción a sus caricias.  Tras intentar  ayudarle a quitárselo aprovechó la inmovilización de sus brazos para continuar besándole,  mordisqueándole de forma muy sutil  , algo que él no tardó en devolverle al cogerla por la cintura y con el peso de su cuerpo  terminar encima de la colcha .
Los juegos iniciales dieron lugar a una maravillosa contemplación ,la que Iam hacía del rostro de una Claire entregada , que se dejaba llevar , cuyos ojos recordaban a los de una niña que no supiera a qué debía enfrentarse , con una inocencia inesperada , cristalinos , sinceros  y sólo un deseo de agradecimiento inmenso fue lo que le llevó , sin dejar de mirarla  ni por un segundo ,  con suma delicadeza , a acariciarla con el anverso de sus dedos,  cerrando sus ojos para besar uno y el otro a continuación , para hacer suyas sus mejillas  y devolver a sus finos labios la sensación de ser redibujados al rozar todo su contorno con las yemas de esos mismos dedos .
Una respiración honda , profunda , un suspiro exhalado  dio pie al capitán para , mientras los ojos de Claire esperaban inquietos, deshacerse uno por uno de cada botón de la blusa que llevaba puesta  y con cada extracción a través de su ojal , la cálida  humedad de su boca , deseosa de colmarla de placer infinito , se apoderaba de su cuerpo sin impedimento alguno , erizada con cada roce , reverberando cada gesto suyo como si fuese su primera vez , una vez donde la ternura lo llenaba todo  otorgando  al amante dadivoso del poder de liberar a la única mujer que se sentía presa de sí misma .

Una comunicación no verbal gesticulada con miradas que no engañaban  fue lo único que se necesitó para que la contemplación de la desnudez del otro fuese el mayor placer natural , para que antes de que tuviera lugar  la conversión de dos cuerpos que se deseaban en uno solo  las pieles de ambos decidieran encontrarse de otra forma . Caricias  sin orden ni sentido  que sólo disfrutaban del plácido toque , de la circulación sin prisas ni pausa mientras todas los receptores de cada terminación nerviosa hacían responder al resto del cuerpo . Los escalofríos más placenteros , las aspiraciones más sensuales … Susurros …. Palabras que divagan entre las ansias por poseer y la necesidad de ofrecer  al calor de un aliento que penetra y se hace camino poco a poco no encontrando resistencia alguna,  como Iam tampoco la encontró cuando ella , abrazada a él  , se le acercó al oído y le dijo : “ Quiero sentirte dentro de mí “ . Seguidamente alejó su cabeza sólo un poco,  lo miró  y  él escuchó : “Sé mío por entero “. 

Dejar de ser quién debes ser para mostrarte tal cual eres cobró otra dimensión para ambos ,  especialmente para ella . Sin que ninguno de los dos cuerpos se alejase y dejase de sentir al otro ,  las yemas de los dedos de Iam fueron descubriéndola en toda  la extensión de su intimidad  sin dejar de observar las señales de una conquista en la que los galones no existían , ni los reglamentos , ni las órdenes . Claire era ella , la mujer por cuya piel las gotas de sudor veían interrumpido su libre movimiento por las manos , los labios , los brazos  e incluso el pecho de aquel desconocido que sin saber cómo había logrado derribar su muro de protección  y ahora , tras su insistencia , lograr que fuera suya tal y como él presumía que debía ser cuando el uniforme desaparecía . Su convencimiento al verla , el flechazo que se produjo en su interior y le llevó a una curiosidad desatada , las palabras tenidas en cuenta pero no en demasía ,  cada gesto , cada movimiento … Todo en ella era lo que sin saber bien por qué  él necesitaba desde hacía mucho tiempo , el mismo que llevaba creyendo que jamás conseguiría a alguien así  y ahora , entre sus brazos , en su interior , la tenía  a merced del único deseo plausible que él deseaba conceder , que la mujer que había conocido no desapareciera nunca  y que no se alejase de su lado .

Aquel calor … la presión que iba ascendiendo conforme se adentraba en ella y que provocaba que su cuerpo se endureciera como una roca  aferrándose  a las sábanas , a su cabello humedecido por el sudor , a su boca entre abierta … Todo era insuficiente para tratar de retenerse , no consiguiéndolo , no queriendo conseguirlo .  
Y sus rostros no dejaron de encontrarse , aspiraciones entrecortadas con cada nueva entrada con la que hacerse suya y que así pudiera sentirlo , gemidos casi silenciosos  como el murmullo de la música que sólo ellos podían escuchar ,  una beso amplio e interminable sumidos en un abrazo como el mejor colofón a algo  que los había hecho diferentes ,  a algo que se iniciaba a partir de aquella noche y que ninguno de los dos necesitaba calificar .

Y las horas pasaron sin que nadie estuviese pendiente del reloj . Como si los amantes no quisieran  despedirse pero con la sensación de que no volverían a verse  no deseando  perder ni un solo segundo.
Dos cuerpos  que permanecían desnudos , sin más cobertura que su propia piel  . Ella boca arriba , con los ojos abiertos ,  pensando . Él, de lado , mirándola , deslizando los ojos por todo su perfil, recordando cada centímetro de piel , su sabor .

·        CLAIRE :  Dime que volverás .

Físicamente se la veía tranquila, relajada , pero su voz denotaba algo muy distinto . Extrañado y sin saber qué contestar , vio como giraba la cara y con ella el resto del cuerpo , colocándola encima de sus manos .

·        IAM : Sólo van a ser …

·        CLAIRE : No – le interrumpió – no lo digas porque del tiempo nadie está seguro . 

Su preocupación le sorprendió .

·        CLAIRE : ¿Qué es lo que quieres de mí Iam Keneth ?

Él sólo lo pensó ,  no se atrevió a decírselo en alto pero desde luego lo tenía muy claro desde la primera vez que se cruzase con ella . Entonces , ni antes ni ahora era el momento de afirmarse , sobre todo cuando nadie  podía asegurarle la vuelta y que si está se produjese que no fuera en un cajón de metal .
Iam sabía lo que quería de ella , lo que pretendía con ella  pero no , aún no había llegado el momento de decírselo , de lo que estaba seguro es de que esa oportunidad  había pasado para quedarse y que él no estaba dispuesto a perderla .  
Sin una respuesta clara que la extrajese de sus dudas , él sólo pudo acercarse y arroparla con sus brazos  mientras la noche iba desapareciendo dejando al amanecer el lugar que le corresponde .



ANA PATRICIA CRUZ LÓPEZ
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