Las primeras
palabras escritas en aquella página del libro fueron tuyas ,
pude reconocerlas
, sentirlas , escucharlas
y con ellas
todo fue distinto ,
los
recuerdos se disiparon ,
las alegrías
se ennoblecieron ,
y tu rostro
fue emborronándose en mi memoria por más esfuerzos que yo impusiera por tratar
de aferrarme a cada línea clara .
La forma en
que las páginas fueron pasándose la hubiste de marcar tú
y jamás fue olvidada
y la
chiquilla obediente y de fácil aprendizaje
quiso ser tu alumna más aventajada ,
seguir la
misma senda sobre tus pasos ,
adentrarme
en ti ,
conocer tu
alma .
Cada gesto
tuyo formulaba una nota ,
una nota más
en esa especial partitura con la que
acompañabas la lectura , la de las páginas en blanco que con tinta invisible
ibas copando , contando una historia,
esa historia
que tú y yo sabemos y nadie más conoce y
en el que la melodía
compuesta
por tus susurros ,
en los que
la poesía se recompone y abriga mis
sentidos ,
suena dispar
,
creciendo
como mis anhelos
para acabar
en los confines de nuestro propio infierno
en el que
las heridas no acaban por cerrar
y en el que
la sangre ya hace tiempo que dejó de ser pura .
Cada
verbo por ti pronunciado
con esa
ligera oscilación de unas letras que no parecen querer escapar de tu boca ,
cada verdad
recubierta del dulce veneno de una mentira piadosa de la que no soy víctima ,
cada mentira
creída y revestida de una deliciosa verdad dolorosa que como alto muro puesto
en mi camino hace que detenga mi paso una y otra vez ,
cada sonido
que verbalizas penetra en mi cuerpo como si fuese un puñal al que le va
creciendo su hoja en mi interior desgarrándolo ,
y mi vida,
pese a todo , sigue sumida a un solo
sentimiento ,
el único y
verdadero
en el que no
hay más páginas que pasar
ni palabras
que decir ,
el final del
libro que un día empezaste a leer y yo sobrescribía en tu piel con nuestros
recuerdos reconstruidos ,
el final que
jamás se cerró ,
aquel en el
que no habrá segundas partes porque la primera no ha dejado de existir ,
aquel que tu
huella esculpe en cada pergamino de sus hojas ,
en el que
los silencios se convierten en una sola mirada fija e intensa
y el mensaje
se resguarda en el lugar donde nadie
jamás ha llegado .
Y aquellas primeras
palabras tuyas que habitan en mi memoria
siguen y fijan mi destino ,
un viaje a ninguna
parte si tú no estás
y a los
confines de mi mundo interior en el que sé que nunca te querrás marchar .
ANA PATRICIA
CRUZ LÓPEZ
(Todos los
derechos reservados )
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